Los hinchas argentinos fueron brutalmente reprimidos a pocos minutos de comenzar el partido y humo una particularidad que llamó la atención por la innecesaria forma de provocar.

La policía brasileña atacó con bastones a un grupo de visitantes que estaban pacíficamente instalados en una de las tribunas y se conocieron imágenes de un hombre que se tomó a broma lo que estaba sucediendo.

En el video se puede observar del lado inferior derecho que un seguidor de Brasil sacó su celular para hacer una selfie mientras levantaba uno de sus dedos, provocando la represión que estaban sufriendo los hinchas argentinos, otra vez, en Río de Janeiro.

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El partido estuvo varios minutos demorado y hasta Giovani Lo Celso y Emiliano Martínez debieron acercarse a una de las tribunas para evitar que la situación pasara a mayores en un clima hostil que también supo sufrir la gente de Boca en la final de la Copa Libertadores contra el Fluminense.