"La relación con Román fue muy simple y muy directa. Yo la primera vez que lo vi le dije: 'Yo tengo determinadas situaciones...' y a él le expliqué cuáles eran mis situaciones. No las explicó ni a la prensa, ni a la tele. Y él me dijo: 'No, queremos que te quedes acá, nosotros te queremos preparar físicamente y tenemos mucha confianza en vos'", contó el campeón del mundo.

Además, reconoció que las palabras del vice le llegaron: "Me afectó lo que me dijo. Me entrené unos días con el equipo, con ellos que me pedían quedarme. Y de repente tuve que decirles 'miren, me voy mañana, porque si no me voy de inmediato me quedo acá y hago algo que probablemente va a ser un daño para mi familia".

"Yo ahí estaba re bien, muy bien. Y tengo una nostalgia por aquel lugar, no solo futbolística, sino también de ciudad, de país, de gente que conocí. Una nostalgia fuerte, aunque estoy bien también acá en Roma, pero es una nostalgia pesada y yo y mi familia la sentimos de vez en cuando", agregó.