El atleta chubutense que participó en la final del maratón de 42 kilómetros en Munich en el año 1972, celebra hoy 75 años de vida. Conoce su historia en la siguiente nota.

Decir atletismo olímpico y nombrar a Chubut lejos de nuestra provincia, es decir Nazario Araujo. Es una relación automática para los que conocen del tema. Es que hay un capítulo en la historia olímpica que lo nombra, y quedará para siempre.

Nazario Araujo comenzó su vínculo con el atletismo a los 12 años de la mano de su papá que lo acercó al doctor Antonio Popovic, y de a poco se fue destacando hasta ponerse como objetivo llegar a un Juego Olímpico. Su destreza física hizo que pueda lograrlo, y convertirse en el primer atleta de Comodoro Rivadavia en lograrlo.

En el calendario olímpico de 1972 figuraba que la maratón se correría el sábado 9 de septiembre, pero ante la decisión del Comité Olímpico Internacional de suspender los Juegos durante 34 horas por el asesinato de once atletas israelíes por parte de la organización terrorista Septiembre Negro, la competencia, en la cual participaba Araujo, se postergó para el domingo.

Cuenta El Gráfico que de los 74 participantes, tres eran argentinos. Araujo utilizó el número 4, Ramón Cabrera el 6 y Fernando Molina el 9. Los primeros 600 metros se corrieron dentro del estadio, y el primer atleta en salir a la calle fue el argentino Molina. Finalizado el recorrido, el estadounidense Frank Shorter ganaría la maratón, convirtiéndose en el primer norteamericano en conseguirla desde Londres 1908.

A tan solo cuarenta metros de la meta, Araujo se descompensó, sufrió un colapso hepático y cayó desmayado. De inmediato, los médicos lo atendieron y rápidamente se recuperó, cuenta la revista El Gráfico.

“Ser el primer atleta olímpico en representar a esta querida y amada Patagonia marcó un hito. Pusimos olímpica a la provincia del Chubut. No soy individualista, y siento que he aportado algo muy interesante para nuestra provincia. Ser olímpico es algo para toda la vida. Que mis nietos lean hoy un libro y vean mi nombre es algo muy lindo. El atletismo fue muy importante para mí, me permitió salir a correr por diferentes países que sin este deporte no podría haberlo hecho. Eso me fortaleció sin lugar a dudas en todo sentido”, comentó hace un tiempo a El Patagónico.

Hoy celebra no solo llegar a los 75 años, sino también haber compartido su sabiduría en el atletismo y dejar un legado en los más jóvenes. Jorge Mérida fue uno de sus atletas junto a Mario Rodríguez por nombrar solo algunos. Hace un tiempo se formó ANA (Agrupación Nazario Araujo) donde cientos de chicos comenzaron a querer esta noble disciplina en Comodoro Rivadavia.

(Foto: archivo El Patagónico)

El olímpico Nazario Araujo está de festejo