Dalma Maradona reveló crudos e impactantes detalles en el juicio por la muerte de su padre: "Se reían de él"

Este martes, Dalma Maradona, hija mayor del ícono del fútbol mundial Diego Maradona, se presentó en el Tribunal Oral en lo Criminal N.º 3 de San Isidro para declarar en el juicio que investiga la muerte de su padre. 

Acompañada por su madre, Claudia Villafañe, y en un marco cargado de emoción, la actriz brindó un testimonio contundente en el que apuntó directamente contra los médicos imputados y reveló detalles sobre el deterioro de la salud del “10” en sus últimas semanas de vida.

Dalma relató que tanto ella como su familia venían observando un marcado empeoramiento en el estado de salud de Diego Maradona. “Le habíamos dicho a Luque, Cosachov y Díaz que no lo veíamos bien a papá. Caminaba mal, a veces lo sentíamos un poco perdido, nos llamaba por videollamada y no entendíamos lo que decía”, afirmó, señalando directamente al equipo médico que está siendo juzgado.

A pesar de los reclamos, la respuesta de los profesionales era evasiva: “Nos decían que era algo momentáneo, que tenía semanas buenas y malas, pero que estaba bien, que estaba medicado”, explicó Dalma, evidenciando la falta de atención adecuada.

EL DÍA QUE DALMA MARADONA YA NO RECONOCIÓ A SU PAPÁ

El punto de inflexión, según la actriz, fue el día en que Diego cumplió 60 años y se realizó la celebración en el estadio del club Gimnasia y Esgrima de La Plata. “Era lo que veníamos diciendo. Mi papá no estaba bien, estaba lento, perdido. A partir de ese día sí empezaron a decir que había que hacerle estudios, pero nosotras lo decíamos de antes”, recordó.

Dalma fue contundente al responsabilizar a los médicos Luque, Cosachov y Díaz por haber convencido a la familia de que la mejor opción tras la operación de cabeza de Diego era la internación domiciliaria. Sin embargo, esa opción estuvo acompañada de promesas incumplidas. “Nos prometieron una internación domiciliaria que nunca sucedió. No hubo ambulancia ni enfermeros”, denunció.

Además, detalló: “Nos prometieron enfermeras 24 horas, gente que estuviera ahí para tomarle la presión y darle las pastillas. También acompañantes terapéuticos, una ambulancia y aparatología que la daba la prepaga. Eso nunca pasó”.

Dalma describió a Diego como “muy presente”, a pesar de sus problemas de adicciones que, según ella, la familia acompañó “de la manera que pudimos las tres”. “Me da mucho orgullo que él dijera que se había podido recuperar gracias a nosotras”, agregó.

Durante la pandemia, las comunicaciones con su padre fueron principalmente por videollamada, ya que el psicólogo Carlos Díaz había pedido a la familia que no lo visitaran “para no agobiarlo”. “El último tiempo ya no reconocí a mi papá porque ya no se reía, se perdía. Estábamos en una videollamada y no sabía quién estaba del otro lado”, confesó. Dalma nunca pudo ir a la casa de Tigre a verlo y la última vez que lo tuvo frente a frente fue tras la operación en la Clínica Olivos.

Sobre el día en que Diego Maradona fue reanimado, Dalma relató: “Llegué a la casa de Tigre y lo vi muy hinchado. Estaba tapado con una sábana, pero igual se podía ver que estaba muy hinchado. Yo me tiro encima cuando entro porque pensaba que se iba a despertar de alguna manera o algo, pero estaba muy hinchado. Tenía las manos muy hinchadas, la panza, el cuerpo, todo”.

Dalma expresó que, incluso cuatro años después, siguen conociendo detalles dolorosos sobre el trato que recibió su padre por parte de los médicos imputados. “Nos sigue doliendo el maltrato que recibió y yo no sabía. Esto se podría haber evitado”, afirmó con tristeza.

“Nos pasa que nos seguimos enterando cosas al día de hoy. Pasados cuatro años, seguimos escuchando de la manera que se referían a mi papá tanto Luque, Cosachov y Díaz. Cómo hablaban de él, cómo se reían de él, cómo hacían el tratamiento y cómo terminó. Sigue siendo muy doloroso el maltrato que recibió y yo no sabía. Esto se podría haber evitado”, remarcó.

Finalmente, concluyó: “Cuando nos dijeron que estuvo agonizando y que nadie le ofreció ayuda, fue muy doloroso. Tengo la tranquilidad de saber que hice todo lo que tenía a mi alcance. Nunca pensé que este fuera a ser el desenlace”.